Publicado el 15-07-2003
Moderno enfoque del folclore
Los géneros musicales cambian, aunque no pierden su esencia. Así se deduce del enfoque que la cantante de folclore Lorena Astudillo imprime a su interpretación. La artista pertenece a una nueva generación de folcloristas que se anima más según contó a «Río Negro».
Lorena Astudillo pertenece a la nueva generación de artistas folclóricos y ha transitado por diversos estilos y géneros, además de tener una intensa preparación académica, vocal y actoral que la ha llevado a editar dos grabaciones y actuar en diversos pubs, teatros, centros culturales y el interior del país. Opina que el folclore adquiere nuevas fuerzas a pesar del boom del tango, y en esta aseveración están encaminadas propuestas como la suya, casi identificada con un recital de cámara, con temas muchas veces olvidados.
– ¿Cómo se da esta identificación con el folclore?
– Los orígenes de mi vocación se remontan a mi infancia, después de una búsqueda incesante por distintos géneros y estudiar muchos años. Desde música clásica hasta la popular. Encontré que el mejor lenguaje para mi era el folclórico, que de todos modos no lo tomo tal como se lo escucha por tradición Yo tomo la obra y desde los arreglos o la armonía se incorporan otros componentes que son parte de lo que voy escuchando y estudiando, y me reencontré con las formas que tenía en mi desde muy chica y me dispuse a expresarlas en este género.
Por eso a los puristas les recuerdo que lo que hago tiene muchas influencias de otros géneros, no es puro en cuanto a la expresión original, sí es muy respetuoso de la línea melódica y la obra en si Creo que mi trabajo más profundo es interpretar las letras lo más posible y tener siempre el contacto con el paisaje que postula el folclore, que constantemente toma al hombre, su relación con la tierra y la nostalgia. Está teñido de nostalgia y de eso habla Este sentimiento con sus diversos matices me atrapa.
– ¿Es un enfoque del folclore de todas las regiones, aún en grabaciones y presentaciones?
– Cada lugar tiene lo suyo, lo más originario. Yo en general tengo tendencia por folclore norteño y también estoy incluyendo algo de lo latinoamericano En mi nueva grabación por ejemplo, hay un tema de Bola de Nieve, el compositor cubano. Porque siempre en los discos que uno hace, algo de lo que vendrá se vislumbra y esa es una veta interesante. Como que uno hace las grabaciones para dejarlas ir. Tengo dos grabaciones, la última flamante y con muchas horas de estudio, mucho tiempo que comparto con las presentaciones en lugares como el San Martín, Teatro Avenida, Centro Cultural Borges, Babilonia, y casi todas las peñas, además de provincias como Salta. Tengo un grupo básico con percusión , guitarra, piano Dada la realidad de querer moverse y tocar hay que disponer de un formato muy pequeño. Prefiero hacer experiencias en diferentes lugares y giras, incluso con músicos invitados o con profesionales notables como Lilian Saba, el «negro» Aguirre o un violinista excepcional como Quique Condomí.
Ahora estoy tocando con Osvaldo Burucua y Diego de la Cerda, me junto con pocos músicos pero buenos. Para el primer disco estuve básicamente con dos pianistas y un guitarrista. Pero en el actual la producción va desde cellos hasta otros instrumentos. Desde 1998, cuando grabé por primera vez, empecé a conocer mucha gente y decidí invitar a los más representativos para mi discurso musical, tipo de lenguaje y ejecución. Todos músicos académicos, muy depurados y con una trayectoria que incluso abarcaba el jazz y ese es un aporte muy sutil para el folclore. Son músicos muy difíciles de encontrar por su gran preparación y técnica.
-¿Cómo está el folclore con respecto al Boom del tango?
– El boom del tango viene antes del folclore, en especial en Europa. Tal es así que mi operadora de prensa que está en París y trabaja con el Sexteto Mayor me pidió mis grabaciones porque según me comentó se está apaciguando el furor por el tango y se desea escuchar movimientos nuevos, para lo cual está el folclore, el más viejo movimiento nuestro.
Ahora casi todo está copado por el pop y lo mediático. A favor está que hay alumnos que quieren estudiar cada vez más. El tango y el folclore tiene su espacio, el del folclore no es fácil de descubrir, hay que estar muy metido en el ambiente para ver que existe mucho nuevo y hay cosas hermosísimas El tango tiene una proyección más internacional, televisiva o de festivales internacionales a la que todavía no accedió el folclore Por eso yo intento abrirme a una carrera internacional donde también el folclore incursione en grandes festivales
Por Julio Pagani – Diario Río NegroPublicado el 15-07-2003
Moderno enfoque del folclore
Los géneros musicales cambian, aunque no pierden su esencia. Así se deduce del enfoque que la cantante de folclore Lorena Astudillo imprime a su interpretación. La artista pertenece a una nueva generación de folcloristas que se anima más según contó a «Río Negro».
Lorena Astudillo pertenece a la nueva generación de artistas folclóricos y ha transitado por diversos estilos y géneros, además de tener una intensa preparación académica, vocal y actoral que la ha llevado a editar dos grabaciones y actuar en diversos pubs, teatros, centros culturales y el interior del país. Opina que el folclore adquiere nuevas fuerzas a pesar del boom del tango, y en esta aseveración están encaminadas propuestas como la suya, casi identificada con un recital de cámara, con temas muchas veces olvidados.
– ¿Cómo se da esta identificación con el folclore?
– Los orígenes de mi vocación se remontan a mi infancia, después de una búsqueda incesante por distintos géneros y estudiar muchos años. Desde música clásica hasta la popular. Encontré que el mejor lenguaje para mi era el folclórico, que de todos modos no lo tomo tal como se lo escucha por tradición Yo tomo la obra y desde los arreglos o la armonía se incorporan otros componentes que son parte de lo que voy escuchando y estudiando, y me reencontré con las formas que tenía en mi desde muy chica y me dispuse a expresarlas en este género.
Por eso a los puristas les recuerdo que lo que hago tiene muchas influencias de otros géneros, no es puro en cuanto a la expresión original, sí es muy respetuoso de la línea melódica y la obra en si Creo que mi trabajo más profundo es interpretar las letras lo más posible y tener siempre el contacto con el paisaje que postula el folclore, que constantemente toma al hombre, su relación con la tierra y la nostalgia. Está teñido de nostalgia y de eso habla Este sentimiento con sus diversos matices me atrapa.
– ¿Es un enfoque del folclore de todas las regiones, aún en grabaciones y presentaciones?
– Cada lugar tiene lo suyo, lo más originario. Yo en general tengo tendencia por folclore norteño y también estoy incluyendo algo de lo latinoamericano En mi nueva grabación por ejemplo, hay un tema de Bola de Nieve, el compositor cubano. Porque siempre en los discos que uno hace, algo de lo que vendrá se vislumbra y esa es una veta interesante. Como que uno hace las grabaciones para dejarlas ir. Tengo dos grabaciones, la última flamante y con muchas horas de estudio, mucho tiempo que comparto con las presentaciones en lugares como el San Martín, Teatro Avenida, Centro Cultural Borges, Babilonia, y casi todas las peñas, además de provincias como Salta. Tengo un grupo básico con percusión , guitarra, piano Dada la realidad de querer moverse y tocar hay que disponer de un formato muy pequeño. Prefiero hacer experiencias en diferentes lugares y giras, incluso con músicos invitados o con profesionales notables como Lilian Saba, el «negro» Aguirre o un violinista excepcional como Quique Condomí.
Ahora estoy tocando con Osvaldo Burucua y Diego de la Cerda, me junto con pocos músicos pero buenos. Para el primer disco estuve básicamente con dos pianistas y un guitarrista. Pero en el actual la producción va desde cellos hasta otros instrumentos. Desde 1998, cuando grabé por primera vez, empecé a conocer mucha gente y decidí invitar a los más representativos para mi discurso musical, tipo de lenguaje y ejecución. Todos músicos académicos, muy depurados y con una trayectoria que incluso abarcaba el jazz y ese es un aporte muy sutil para el folclore. Son músicos muy difíciles de encontrar por su gran preparación y técnica.
-¿Cómo está el folclore con respecto al Boom del tango?
– El boom del tango viene antes del folclore, en especial en Europa. Tal es así que mi operadora de prensa que está en París y trabaja con el Sexteto Mayor me pidió mis grabaciones porque según me comentó se está apaciguando el furor por el tango y se desea escuchar movimientos nuevos, para lo cual está el folclore, el más viejo movimiento nuestro.
Ahora casi todo está copado por el pop y lo mediático. A favor está que hay alumnos que quieren estudiar cada vez más. El tango y el folclore tiene su espacio, el del folclore no es fácil de descubrir, hay que estar muy metido en el ambiente para ver que existe mucho nuevo y hay cosas hermosísimas El tango tiene una proyección más internacional, televisiva o de festivales internacionales a la que todavía no accedió el folclore Por eso yo intento abrirme a una carrera internacional donde también el folclore incursione en grandes festivales
Por Julio Pagani – Diario Río Negro